Por María Celsa Rodríguez
Es un hecho que Bolsonaro gane en segunda vuelta, y esto traerá un auge de nuevos paradigmas para América Latina, al poner un freno a la corrupción que arrastró a las empresas del Estado, a políticos, funcionarios y ministerios.
Si bien los del Partido de Lula y Dilma hicieron de todo para quitar del medio a Bolsonaro, al punto de atentar contra su vida, cuando el 6 de septiembre pasado Adelio Bispo de Oliveira -quien trabajaba para Dilma Rousseff – lo puñaló. De todos modos Fernando Haddad, solo obtuvo el 29.3 % de votos.
De acuerdo a esta foto que fue tomada en un acto de campaña, Haddad esta «protegido» por Cuba, ya que lo rodean en este acto gente de Castro. Eso nos esta indicando que en el supuesto que ganase Haddad, gobernaría como en Venezuela, el G2 cubano (?). Entonces el castrismo tendría influencias ideológicas en la toma de decisiones, como pasa en Venezuela (?). Y Brasil, seguiría bajo el poder del Foro de Sao Paulo.
¿Esto estaría señalando que quizás detrás del atentado que sufrió Bolsonaro, esta Cuba?
Las líneas marcan los hechos que parecen alinearse hacia un mismo punto, solo el razonamiento encuentra explicaciones que responden a las preguntas. Recordemos que Bolsonaro, detallo los altos índices de violencia en relación con aquellas ciudades gobernadas por partidos que integran el Foro de Sao Paulo, al afirmar que «donde los participantes del Foro de Sao Paulo gobiernan, sube la criminalidad».
Justamente el Granma de Cuba, publicó que «Fernando Haddad, presenta el programa de Gobierno, ideado por Lula, para recuperar Brasil». Da Silva, uno de los fundadores del Foro de Sao Paulo.
El populismo suena en ambas trincheras políticas pero Haddad, habla de volver a la época en que Lula, transitó su primer mandato, algo que sabemos que políticamente es imposible, ya que los tiempos y las circunstancias son cambiantes. «Brasil Feliz de Nuevo» dice el plan de gobierno que propone que «Brasil va a volver a generar empleos a corto plazo, valorar de nuevo el salario mínimo e impulsar la economía popular, con inversiones públicas», que Lula, ha diseñado en caso que Haddad, se ponga la banda presidencial.
Por su parte Paulo Guedes, quien será el Ministro de Economía de Bolsonaro, es un Chicago Boys que desea instalar una economía abierta reducir impuestos, achicar el Estado por medio de «muchas privatizaciones», además de realizar reforma estructurales que como consecuencia de los hechos de corrupción han provocado un desequilibrio político.
Por su parte, la preocupación de Bolsonaro, es la situación de Venezuela, que esta ocasionando un problema geopolítico en Latinoamérica, ante las miles de personas que emigran por la catastrófica situación que impera allí.
Maduro, esta presionado por sus vecinos y una operación bélica en su frontera con Colombia, parece asomarse como estrategia que posibilite a los Estados Unidos, intervenir militarmente.
Mientras Brasil, esta entendiendo que Bolsonaro, es el camino, el Foro de Sao Paulo, se va debilitando poco a poco.
La autora es: Directora de ChacoRealidades; www.chacorealidades.blogspot.com.ar; Analista del Circulo Acton Chile @CirculoActonChile